La Cátedra Macrosad de Estudios Intergeneracionales de la Universidad de Granada ha colaborado y mentorizado el “Estudio para la creación o transformación de centros de atención y cuidado a personas mayores en centros intergeneracionales” del SEPAD (Servicio Extremeño de Promoción de la Autonomía y atención a la Dependencia), firmando su autoría Yolanda Vilorio Gómez.
Para llevarlo a cabo han sido fundamentales el apoyo de la Junta de Extremadura a través de la Secretaría Técnica del SEPAD (que ha posibilitado la cercanía y toma de contacto con los centros), el apoyo de la fundación FundeSalud (Fundación para la Formación e Investigación de los Profesionales de la Salud de Extremadura) y, por otro lado, la experiencia y conocimiento de la Cátedra.
Este estudio ha contribuido a responder a la necesidad permanente de mejorar el modo de acompañar a las personas en sus procesos de envejecimiento y, llegado el caso, de apoyo institucional cuando se requieran cuidados por razones de dependencia. Eso sí, respetando siempre los derechos y la singularidad de cada persona. A tal fin, la Junta de Extremadura se ha abierto a la innovación basada en evidencias y, en esta ocasión, se pregunta por lo que podría aportar la introducción de una perspectiva intergeneracional. Así, el estudio queda enmarcado en el espacio delimitado por un pentágono en cuyos vértices se colocan 5 términos: Envejecimientos – Cuidados – Servicios – Centros – Intergeneracionalidad.
El trabajo de investigación se ha plasmado en dos documentos, uno más amplio que recoge la experiencia y resultados obtenidos en cada centro (uno de ellos en el ámbito rural) y otro que sintetiza la información del primero a modo de protocolo-guía.
La Cátedra manifiesta que ha sido una experiencia innovadora de investigación social que ha tenido como motor fundamental las investigaciones realizadas actualmente sobre espacios y prácticas intergeneracionales, prestando especial atención en incluir las posibilidades que ofrece la intergeneracionalidad aplicada de modo multidisciplinar, invitando a incluir su comprensión y práctica tanto en personas-profesionales de los centros como en las personas que los habitan y les dan sentido cada día.
